¡Hola! Como os conté, el jueves estuve en los premios Prix Marie Claire. Fue una experiencia muy divertida de la que os hablaré en próximos post, pero hoy os quería contar lo que fue la anécdota de la noche que nada tuvo que ver, como algunas quisisteis adivinar, con una posible incorporación del vestido de 24fab a mi lista de top momentos dramáticos en el arte de pedir prestado. ☺ ☺
El momentazo de la noche vino cuando vi que la IT girl Olivia Palermo, que recibió el premio a Icono Fashion del año, se acercaba a nuestra zona. Me puse realmente nerviosa y me acerqué a ella sin pensarlo para presentarme, decirle lo mucho que admiraba su estilo y pedirle una foto. Este es el momento que pudimos retratar gracias a Esther.

¿Qué os parece? Os aseguro que es una mujer con una compostura increíble, desborda mucho estilo, elegancia, suave, frágil, especial… y que las fotos que hayáis podido ver de ella en los premios no le hacen justicia.
La verdad es que me sorprendí a mí misma por la ilusión que me hizo este momento ya que no me considero una persona idólatra o de alterarme al ver a personajes famosos. Más bien todo lo contrario.
Esta emoción no la sentía hacía tiempo y me hizo pensar en mis ídolos de adolescente. ¡Mirad qué referentes tenía por aquellos tiempos!

El primero de ellos fue el ilustre ciclista navarro Miguel Induráin (icono fashion donde los haya ☺). Era un acontecimiento anual cada vez que participaba en el tour de Francia. Y recuerdo mi necesidad de decirle lo mucho que le admiraba. Ni corta ni perezosa recuerdo que en mi playa, donde no hay casi nada, me metí en un barracón con 4 cabinas estilo locutorio para llamar a mi amiga Idoia, que vivía en la misma urbanización que Miguel, y pedirle desesperada el número de su chalet. Le mandé una carta.

Otra de las personas a las que admiré mucho fue la gimnasta Carolina Pascual, medalla de plata en Barcelona 92, a la que tuve la suerte además de ver sobre el tapiz en las olimpiadas. A ella también le cayó otra carta mía. Y simplemente recuerdo una frase que le ponía que era algo así como: “Me haría mucha ilusión que me escribieras y si recibiera tu carta la abriría como un pirata abre un tesoro…” ☺ ☺ ¡Menuda poetisa estaba hecha yo hace 20 años!

Y la tercera persona a la que le cayó una carta mía fue a la reportera de televisión Almudena Ariza. ☺ Me muero de la riza. A ella le escribí algo así como: “Estamos toda la familia junta este verano y nos encanta cómo comunicas la información y presentas el telediario. Eres súper profesional…” ¿Conocéis a algún presentador de las noticias que no parezca profesional cuando presenta las noticias? ☺
Todo esto sucedió el verano del ´92 que para muchos fue el año de las olimpiadas pero para mí fue el verano de las cartas. Esperé durante un tiempo respuesta con mucha ilusión aunque lógicamente no la recibí. Ahora han pasado 20 años, en los que no he escrito ninguna carta de admiración; hasta el día de hoy:
“Dear Olivia, yu ar veri biutiful and a wanderful human being…”
Y vosotros, ¿por quién sentís especial admiración? ¿Tenéis alguna anécdota divertida o entrañable con famosos? Espero vuestros comentarios.
** Para conocer todo sobre el estilo de Olivia Palermo, no dejéis de ver el análisis de su estilo que hice AQUÍ, AQUÍ y AQUÍ.







